Saber combinar: un arte

Fiona Ferrer con joyas de Rabat

La pasada semana Fiona Ferrer nos ofrecía una estupenda imagen de lo que una elegancia sencilla y clásica representa. En esta ocasión la polifacética Fiona nos muestra otra imagen bien diferente con joyas de Rabat. Con motivo de su nuevo proyecto editorial nos ofrece un personal reportaje aprovechando las múltiples disciplinas a las que se dedica, entre otras: moda y joyas. En cuanto a lo que de joyas se refiere Fiona pone en escena y nos ofrece la oportunidad de comentar un estilo bien distinto del suyo propio que la pasada semana nos mostraba.

Empezaremos con los pendientes de zíngara de la primera imagen: Grandes y en oro amarillo muy en la actual tendencia. Lo más importante a la hora de comentar esta imagen es poner el acento en que: No podemos ser rehenes de la moda. Si la moda no es nuestro estilo, si no nos favorece, debemos buscar otra moda. ¿Qué le pasa a Fiona?.  Fiona tiene una cara refinada y de niña buena, los pendientes son enormes, dominan y enturbian por completo su sonrisa casi angelical. Estos pendientes requieren una melena suelta, probablemente oscura, una cara amplia (por no decir grande) y sobre todo fuerte, dura, agresiva, que domine sobre los pendientes.

Fiona Ferrer

Obviamente no se trata de enjuiciar las joyas ni personas, sino de cómo las joyas sientan en los distintos estilos y tipología de cada mujer. En esta segunda ocasión pasa algo parecido; los pendientes deforman la cara de Fiona exagerando una redondez que no tiene. Además el volumen y las formas curvas de los pendientes alteran la armonía rectilínea del traje y lazo. 

Cualquier pendiente corto y plano, recogido alrededor del lóbulo, en oro amarillo, y  quizá montado con unos citrinos o "fumés", hubiera resultado más propio, estilizando y dejando limpias las formas de su cara y traje de chaqueta.

Fiona Ferrer

Aunque algunos habéis comentado la caña que me dedico a dar al personal, con estas dos últimas entradas queda patente que no es esta mi intención en absoluto. La pasada semana alababa la elegancia de Fiona, hoy crítico el modelo de este reportaje. No se trata de criticar a Fiona si no de aprovechar el modelo que nos ofrece para que si os veis reflejadas en él, podáis sacarle el mejor partido.

El caso es que la cara de Fiona tiene una forma muy especial, y peinada con estos recogidos (que por cierto a mi me encantan) queda aun más patentemente acentuada.
Su cara esta compuesta por dos formas geométricas perfectas; Por una lado un cuadrado, desde lo alto de la frente hasta debajo de la nariz, y por otro un triangulo, desde la boca hasta la punta de la barbilla. Entre ambas acogen unos expresivos ojos rasgados, unos poderosos y sugerentes pómulos y una amable y generosa sonrisa "Profiden"(la cual es muy de agradecer porque es habitual en ella).

Con estos mimbres la cuestión de las joyas para Fiona es harto compleja. Ningún pendiente "poderoso", como las originales criollas de la imagen anterior, ni ninguno de los anteriores es facil que le sienten bien. Como estoy al frente mi negocio desde hace més de 20 años percibo ultimamente una tendencia a que todo vale, todo es opinable o el más comun de los comentarios "sobre gustos no hay nada escrito". Jeje me rio a menudo y comento al intrepido ; "Perdona, sobre gustos hay bibliotecas enteras pero tu quiza no sabes donde estan"

 ¿Por qué hago esta afirmación tan categórica? Pues sencillo al observar las anteriores imágenes: Porque casi cualquier joya será un elemento más, unas formas añadidas, al mosaico ya complejo pero armónico de su cara especial.

Fijaros en la siguiente imagen: ¿no resulta mucho más natural, con estos discretos pendientes que con cualquier otro de los anteriores? 

Fiona Ferrer

Claramente un reportaje de joyas y moda debe de obligar a ponerse de joyas como la Macarena, aunque yo no lo acabe de entender, ¿No estaría mucho mas sexy ese escote sin la cruz de brillantes y tan solo con el colgante de pera rojo apuntando a la comisura del mismo?

Estoy seguro que si yo fuera chica querría uno igual, y siendo chico una igual.

¡Sed Buenos!